La de Brobekk fue la primera planta incineradora de Noruega. |
Esta es una situación relativamente nueva en Noruega. Se
desarrolló sólo en los últimos tres o cuatro años, a raíz de la proliferación en
los países escandinavos de plantas que convierten la basura en electricidad y
calefacción.
"Ahora hay demasiadas plantas comparado con la cantidad
de desechos que se producen", dijo Jannicke Gerner Bjerkas,
gestora de comunicaciones de la agencia Waste-to-Energy de la ciudad de Oslo.